El puerto Chino en Chancay, Perú, recientemente inaugurado de forma parcial, marcó un hito en términos de infraestructuras portuarias: es una de las más grandes desarrolladas en la historia de la región. El puerto significó una inversión de más de 3 mil millones de dólares por parte del gigante asiático y promete generar a Perú una contribución anual a su Producto Interior Bruto (PIB) equivalente al 2% del mismo, así como generar más de 8 mil puestos de trabajo directos e indirectos.
La construcción de este puerto por parte de China es otra parte de la iniciativa impulsada por el país en 2013, conocida como la Belt & Road initiative. Una de sus propuestas es generar nuevas rutas marítimas entre China y el mundo a través de la construcción de infraestructura portuaria. El puerto de Chancay supone para China un acceso directo a materias primas necesarias para este país a la hora de mantener su aparato industrial tecnológico funcionando, como por ejemplo el litio.
La constitución de este proyecto ofrece tanto oportunidades como “lamentos” para diversos países de América Latina. Por un lado, países como Bolivia, Ecuador o Colombia pueden beneficiarse del puerto, ya que les permite exportar sus productos primarios a China de forma más rápida y directa, debido a su cercanía y su capacidad para mover grandes cantidades de cargamento. Sin embargo, países como Chile ven en este proyecto una pérdida, ya que notan como sus propios puertos han perdido competitividad. El puerto de Chancay implica una gran reducción de costos y tiempo a la hora del transporte, lo que hace que los puertos chilenos pierdan caudal.
Por otro lado, la realización de este proyecto ha generado repercusiones en los Estados Unidos, pues se ve con recelo como China se asienta cada vez más en Latinoamérica. Por ejemplo, China se convirtió en el principal socio comercial de Perú, reemplazando a Estados Unidos. Esta situación se ve con temor en el país norteamericano, ya que puede suceder con otros países de la región. Por este motivo, asesores del presidente electo Donald Trump propusieron la aplicación de altos aranceles para productos que pasen por el puerto de Chancay en pos de desalentar que los países latinoamericanos utilicen el puerto y beneficien a China.
Que el conocimiento no se extinga.