La política venezolana y opositora al régimen de Nicolás Maduro fue distinguida con el Premio Nobel de la Paz el pasado 10 de octubre, según anunció el Comité Noruego que otorga el galardón. Este reconocimiento se produce un año después de las elecciones presidenciales en Venezuela, en las que Maduro se proclamó ganador a pesar de que gran parte de la comunidad internacional no reconoció los resultados.
El comité decidió destacar el compromiso de María Corina Machado con los derechos humanos y la democracia en Venezuela. “Este premio constituye un mensaje para los líderes autoritarios de todo el mundo”, afirmó Jorgen Watne Frydness, presidente del Comité Noruego del Nobel.
En una semana marcada por las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien se jactó de sus gestiones para alcanzar un alto al fuego entre Israel y Hamas, los miembros del Comité Noruego dieron la sorpresa al premiar a una representante de la sociedad civil que es la voz venezolana de todos los presos políticos y opositores al régimen de Maduro.
Involucrada en la política desde los 23 años, Machado es ingeniera industrial de profesión y estudió en importantes universidades de Venezuela y Estados Unidos.
En el año 2012, María Corina Machado irrumpió de manera formal con el Partido Vente Venezuela, del que es fundadora y coordinadora. Los principales ejes ideológicos y programáticos del Partido giran en torno a la concreción del equilibrio fiscal, las premisas del libre mercado y el respeto a la propiedad privada. En este sentido, una de sus propuestas más ambiciosas consistía en la privatización de la empresa petrolera PDVSA, una de las más importantes del país.
María Corina Machado gana el Nobel de la Paz 2025
Con el deterioro democrático que sufrió Venezuela luego de la muerte de Chávez y el ascenso a la presidencia de Nicolás Maduro, Machado se convirtió en una de las principales líderes opositoras del país. Luego del fallido intento de Juan Guaidó de proclamarse presidente interino de Venezuela, María Corina Machado se convirtió en la líder de la oposición venezolana.
A finales de julio de 2024, volvieron a celebrarse elecciones presidenciales en Venezuela. Debido a su proscripción, María Corina Machado no pudo presentarse. En su lugar, Edmundo González se presentó como candidato a la presidencia. Con la esperanza de poder derrocar al régimen autoritario, millones de venezolanos en Venezuela y el extranjero recurrieron a las urnas para votar por el candidato opositor. Finalmente, cuando se conocieron los resultados y Maduro se proclamó ganador, las esperanzas de transición democrática se desvanecieron.
En un contexto internacional signado por el retroceso democrático en gran parte de Europa, Norteamérica y América Latina, el venezolano constituye un caso paradigmático. A pesar de haber llegado al poder a través de las urnas, la deriva autocrática del chavismo en los últimos años se convirtió en un ejemplo de las erosiones democráticas en el siglo XXI, un siglo donde las democracias no mueren en la oscuridad, sino a la luz del día.
No obstante, este Nobel de la Paz también está rodeado de controversia. El apoyo de Machado a una intervención de Estados Unidos en su país, así como sus vínculos con Donald Trump hacen dudar a muchos sobre su compromiso con la paz.
A pesar de las críticas, es importante pensar este Nobel como un reconocimiento a la oposición venezolana en su conjunto, un movimiento político que lleva luchando desde hace más de una década por la democracia.
Que el conocimiento no se extinga.