El 21 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Paz, fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 1981, con el claro objetivo de fortalecer los ideales de paz entre todas las naciones del mundo. De este modo, la ONU resalta la gran importancia de la solidaridad, la cooperación, como también la colaboración y la solución pacífica de los conflictos.
La Organización de las Naciones Unidas convoca a todos los países y comunidades del mundo para unirse en esfuerzos colectivos con el propósito de construir juntos un mundo más equitativo, inclusivo y sobre todo pacífico.
La Asamblea General de la ONU, en la Resolución 36/67 comprende la búsqueda de paz como una responsabilidad de la humanidad, por encima de una responsabilidad política.
“La paz fundada exclusivamente en acuerdos políticos y económicos entre gobiernos no podría obtener el apoyo unánime, sincero y perdurable de los pueblos, y que, por consiguiente, esa paz debe basarse en la solidaridad intelectual y moral de la humanidad” (ONU, 1981)
En el contexto mundial actual marcado por diversos conflictos, crisis humanitarias y los múltiples efectos del cambio climático, el Día Internacional de la Paz nos invita a reflexionar acerca de los desafíos que enfrenta la humanidad en torno a la resolución de conflictos. Por este motivo, la ONU destaca que la paz no solo es la ausencia de guerra, también es la presencia de justicia, el respeto a los derechos humanos y la igualdad de oportunidades.
Las iniciativas globales para la paz, instan a toda la humanidad a participar, promoviendola a través de la educación, el diálogo intercultural, la protección de los sectores más vulnerables y la eliminación de prejuicios. A su vez, propone que todas las comunidades participen en actos simbólicos tales como debates y campañas de sensibilización. Estos actos permiten reforzar significativamente los valores de la coexistencia pacífica.
El Día Internacional de la Paz nos recuerda que cada mínima acción cuenta, que mediante el entendimiento mutuo y la cooperación, se pueden superar las divisiones logrando construir un mundo más pacifico y unido para las generaciones que vienen a futuro.
La paz comienza en cada uno de nosotros, no es un sueño imposible de alcanzar, sino que es una responsabilidad compartida, que empieza en el corazón de cada una de las personas que habita la tierra.
En este 21 de septiembre, Dia Internacional de la Paz, la invitación es clara, trabajemos juntos dejando de lado las diferencias para poder crear el futuro de paz y esperanza al que tanto aspiramos.
Que el conocimiento no se extinga.